Con este último trabajo el equipo creativo comienza a crecer en aspectos técnicos
e imaginativos como el de desarrollar una más elaborada iluminación con el aporte
de Juan Carlos Ogando, un diseño mucho más original de la escenografía con el
aporte de alumnos como Armando Álvarez y Carlos Agell, quién además crea un
nuevo logo para el grupo y una nueva imagen en cada uno de sus diseños
gráficos. La incorporación de vestuaristas como Omar Borges y Ghislaine
Latorraca y la llegada al grupo de Iris Dubs como productora comenzaría a marcar
una diferencia en la calidad y factura de los espectáculos que se harían de aquí en
adelante.
Gran parte del teatro profesional se daba cita cada fin de semana en el sótano del
Colegio Champagnat para ver este montaje y conocer a un grupo estudiantil que
sin quererlo se acercaba y comenzaba a formar parte del mundo teatral
venezolano. Skena recibía en su sótano a gente admirada como Isaac Chocrón,
Fernando Gómez, Orlando Arocha, Horacio Peterson, Ugo Ulive, Luigi Sciamanna,
Xiomara Moreno, Moisés Guevara, José Simón Escalona, Héctor Manrique y
hasta maestros del teatro internacional como Alberto Ísola (Perú), María Inés
Falconi y Carlos de Urquiza (Argentina).